miércoles, 24 de junio de 2009

PROBLEMATICA Y DETERIORO AMBIENTAL








PROBLEMÁTICA Y DETERIORO AMBIENTAL
La vida moderna, la comodidad, la salud y la esperanza de vida con elementos a los que nos hemos venido acostumbrando casi sin darnos cuenta. Parece que todas las comodidades con las que podemos contar hoy fueran indispensables y fruto de verdaderas necesidades. Seguramente muchos de los factores de los que hoy disponemos además de hacernos la vida más agradable y cómoda, nos facilitan ciertos elementos mínimos para poder sobrevivir.
El derecho a mejores condiciones de vida, a disponer de mejor salud, a contar con formas ágiles de comunicación, son conquistas que difícilmente podríamos ceder; sin embargo, muchas de las otras comodidades de las que disfrutamos ni son indispensables ni mejoran realmente nuestra calidad de vida.
Las repercusiones de los grandes avances científicos y tecnológicos aparecen ante nuestros ojos a cada instante, muchas veces bajo formas espectaculares como los viajes espaciales o los diagnósticos mediante ultrasonido, otras veces bajo formas tan triviales y cotidianas que pasan casi inadvertidas.
La dimensión general de las repercusiones del hombre sobre la naturaleza quedaría incompleta si no incorporáramos las que influyen directamente sobre nuestra vida cotidiana, por eso, parte de esta sección está orientada a ofrecer algunos aspectos que impactan directamente a la naturaleza, de manera inmediata y cercana a nosotros.
En muchas ocasiones pensamos que la crisis energética, la contaminación atmosférica, la lluvia ácida o la basura es algo que no tiene que ver con nosotros, que son otros los que la producen y los que la padecen. Sin embargo, esto no es así, el hombre con su actuar, de manera casi natural, produce un impacto importante en el medio que le rodea. Gran parte de ese impacto no afecta dramáticamente a la naturaleza, sin embargo otra parte la afecta de manera duradera.
Conocer lo que ocurre en otras esferas es importante, pero llevar este conocimiento a la vida diaria, es tanto o más importante. Asomarse conscientemente un poco al mundo que nos rodea, analizar sus dimensiones y repercusiones, valorar nuestro papel como agentes y víctimas del desarrollo y conocer las formas mediante las cuales cotidianamente contribuimos al deterioro ambiental, son parte de las pretensiones que tenemos al presentar esta parte, donde se espera poder analizar el impacto que el hombre genera sobre la naturaleza, como producto de su desarrollo industrial, tecnológico y científico, así como valorar las repercusiones que tiene el hombre con su actuar cotidiano sobre el medio que le rodea.
Se podría decir que el deterioro ambiental apareció sobre la Tierra aun antes de la aparición del hombre sobre ella. Gran cantidad de gases tóxicos se han liberado a la atmósfera y han permanecido suspendidos durante cientos de años. Algunos de esos contaminantes han sido señalados como culpables de la extinción de algunas especies.
El hombre primitivo ya generaba importantes cambios en el ambiente aunque sólo dispusiera de tecnologías muy precarias. La disposición del fuego dio un importante impulso al desarrollo de la humanidad pero también trajo consigo importantes efectos contaminantes, sobre todo mientras el hombre fue incapaz de controlarlo con seguridad.
Por más de 7000 años el hombre ha puesto en peligro el equilibrio del medio y, a veces, lo ha roto irremediablemente.
Para analizar el deterioro ambiental que estamos presenciando consideraremos cinco parámetros:
la sobreexplotación, la destrucción del hábitat, la introducción de especies exóticas y la contaminación (calentamiento global, efecto invernadero).
SOBREEXPLOTACIÓN
Los ecosistemas cuentan con mecanismos para equilibrar su desarrollo y funcionamiento en condiciones naturales. Los bosques, por ejemplo, tardan en ocasiones varios siglos para instalarse establemente en una determinada zona, en ellos podemos encontrar diferentes poblaciones que regulan su desarrollo e influencia en función de las demás y de los recursos y condiciones ambientales.
En épocas remotas, fenómenos climáticos han cambiado las condiciones en esos ecosistemas y muchas especies han sido eliminadas. Los grandes reptiles, por ejemplo, desaparecieron en un lapso muy corto de tiempo en grandes zonas del mundo, y el espacio que dejaron fue llenándose poco a poco por la intromisión de otras especies que resultaron beneficiadas con su desaparición. Muchos de los fenómenos naturales que han actuado en otros tiempos, lo hacen aún en nuestros días, sumando su efecto transformador al que ejerce el hombre sobre el medio ambiente. La explotación que hace el hombre del medio ambiente adquiere día a día una mayor envergadura. La velocidad con la que consume los recursos naturales supera en la mayoría de los casos la velocidad con que el recurso se regenera, ocasionando un deterioro creciente.
La caza es una de las manifestaciones más evidente de la sobreexplotación. Durante muchos siglos, el hombre ha hecho de la caza uno de los 'deportes' que mejor refuerza la idea de lo 'varonil', que muestra el poder,la fuerza y la valentía. En muchas culturas ancestrales, la mayoría de edad se alcanza cuando los miembros del grupo cobran su primera presa. En las cortes reales tanto de Asia como de África y Europa, uno de los pasatiempos de la realeza estaba basado en la cacería. Muchas especies desaparecieron o están a punto de hacerlo, debido a la sobreexplotación por caza 'deportiva'. El tráfico de pieles, cuernos, plumas y apéndices de animales son hoy un gran negocio. La moda pone en circulación periódicamente el uso de muchos accesorios fabricados con ellos. El empleo de polvo de hueso y cuerno de rinocerontes tiene un gran mercado en la falsa creencia que de ahí pueden obtenerse productos de efectos afrodisíacos. El comercio del marfil, principalmente de colmillo de elefante, ha significado grandes riquezas a ciertos grupos en diferentes sitios en el mundo. A pesar de que el tráfico de especies silvestres está sancionado prácticamente en todo el mundo, esta restricción no se cumple en la mayoría de ellos, y es muy fácil que aún en las carreteras de nuestro país, se vendan libremente una serie de organismos correspondientes a especies que han sido señaladas como amenazadas o en peligro de extinción. Dentro de 100 años la Tierra habrá superado probablemente los 10 000 millones de habitantes y tal vez los recursos alimentarlos puedan cubrir sus necesidades mínimas, sin embargo ¿cuál será el costo para el ambiente?
Según algunos investigadores, si todos los seres humanos fuésemos vegetarianos y compartiéramos la comida por igual, es probable que pudiera mantenerse una población total, con un buen nivel alimenticio, cercana a los 6 000 millones de personas. Si la dieta se complementara con un 25% de proteínas de origen animal, sólo podría mantenerse a la mitad de esta población ideal.
Actualmente la especie humana consume 40% del crecimiento vegetal total del planeta, mientras que las otras especies -alrededor de 30 millones- dependen del 60% restante; si consideramos que la población humana se duplica en pocos años, ¿cómo podremos sobrevivir en esas condiciones, y qué pasará con las demás especies con las que compartimos la biosfera?
Hoy se explotan intensamente alrededor de 70 especies marinas, las cuales se reproducen más lentamente que lo que se pescan y se encuentran en riesgo de extinción si no se frena su explotación.
En nuestros días se cortan 10 veces más árboles que los que se pueden regenerar y los bosques están reduciéndose y desapareciendo en toda la esfera terrestre. Tan sólo ente 1990 y 1995 desaparecieron 65 millones de hectáreas de bosques (más de 5 millones de hectáreas por año), debido a la tala, la quema para obtener zonas de cultivo, los incendios descontrolados y la expansión de la mancha urbana.
Esta devastación ha transformado de manera drástica la distribución de los bosques como puede advertirse en la siguiente imagen (elaborada por la UNEP, Programa de las Naciones Unidas para el ambiente). La producción de alimentos mediante los métodos tradicionales ocasiona serias alteraciones ambientales, como erosión, salinización del suelo, desertificación y muchos otros. Lograr un cambio en las técnicas de cultivo no es sólo un reto de tipo instrumental o de métodos, sino que significa fundamentalmente un cambio en la manera de ser y de pensar del hombre de nuestro tiempo. La producción agrícola está íntimamente ligada, dentro de un sistema de economía de libre mercado, a las ganancias que produce. Para que un agricultor se decida a producir por métodos no convencionales debe convencerse por el lado de las ganancias. El mercado no ofrece protección ambiental, la delimitación de las ganancias que se pueden o se deben obtener, casi nunca se define por el deterioro que puede producir o el cuidado que se puede ofrecer al ambiente
Dar un verdadero valor a la diversidad genética, a la conservación del suelo y de la calidad del agua, deben ser factores básicos que se contemplen en el desarrollo de la política agraria de cualquier país. La urgencia del desarrollo de nuevas estrategias agrarias deberá ir aparejada de nuevas estrategias para conservar el ambiente.
La desertificación de las que alguna vez fueron zonas fértiles está asociada a diversos factores. El pastoreo y sobrepastoreo que se hace en algunas zonas marginales a los grandes desiertos, contribuyen a que estas zonas relativamente estériles se extiendan, con la consecuente modificación del clima, erosión del suelo y disminución de la disponibilidad de agua. En ciertas zonas de África próximas al río Nilo, en Nepal, en la India y en la cordillera de los Andes, en Sudamérica, este proceso está confinando a la pérdida de grandes extensiones.
La salinización es otro de los factores que conducen a la desertificación. Cuando las zonas son regadas con agua que tiene altos contenidos de sales y las tierras tienen un mal drenaje para eliminar los residuos, las sales se acumulan en el suelo y dañan a las plantas. Según algunos estudios, en ciertas zonas el agua puede contener hasta 3.5 toneladas de sal por cada 1 000 metros cúbicos, si los cultivos de regadío pueden ocupar hasta 9 500 m3 de agua al año, el suelo puede estar recibiendo cerca de 33 toneladas de sal en ese mismo lapso. Muchas de las regiones originalmente destinadas a la agricultura van siendo incorporadas a las grandes manchas urbanas que generan las grandes ciudades a su alrededor. El crecimiento de las ciudades modifica el uso de suelo y reduce las superficies cultivables.
La conversión de zonas de cultivo en áreas urbanas supone un mayor gasto de agua y de producción de desechos. El agua utilizada en estas zonas merma la cantidad que puede utilizarse con fines de cultivo. Otro de los factores que afectan la producción agrícola está relacionado con la disminución, y a veces hasta con la pérdida, de la diversidad genética. La práctica de los monocultivos (sobreexplotación de un solo cultivo) produce serios estragos en este sentido.
El uso de un solo tipo de semilla para la producción, por un lado, expone a las cosechas a ciertos peligros como es la invasión de alguna plaga que ataque y acabe con toda la cosecha. Utilizar una sola variedad por largos lapsos y en amplias zonas de un país puede conducir a la quiebra de un momento a otro. Otro de los efectos de esta práctica está relacionado con la sobreexplotación de ciertos recursos del suelo por una sola práctica, ya que ciertas plantas extraen preferentemente un cierto tipo de sales y pueden llegar a agotarla en la tierra. En ese caso se recurre al uso de fertilizantes, con la consecuente degradación ambiental.
Reducir la agricultura a unos cuantos productos atenta contra la diversidad, muchas especies han desaparecido del planeta por un sobreconsumo de ellas o por que su cultivo ya no se practica. En algunas regiones la hambruna llega a tal grado que la producción agrícola no es suficiente para cubrir las necesidades mínimas, y la semilla que se guarda para volver a sembrar es la estrictamente indispensable. Con volúmenes tan reducidos para siembra, algún imprevisto puede acabar por completo con una determinada variedad.
La tala de bosques para destinar estos terrenos a la agricultura y al pastoreo, ocasiona problemas relacionados con la modificación del clima, la erosión del suelo, la pérdida de nicho ecológico para muchas especies, la alteración del equilibrio gaseoso y, finalmente, el desajuste de los ciclos biogeoquímicos, aspectos que ya hemos analizado anteriormente.
Un método para ampliar zonas de cultivo, ampliamente difundido, consiste en la quema de amplias zonas de selva y bosque. El uso de pesticidas o plaguicidas y de fertilizantes son elementos adicionales para comprender que no se trata sólo de dar de comer a los 10 mil millones de habitantes que pronto alcanzará nuestro planeta, sino de encontrar las formas para que esto sea viable sin sacrificar el medio natural. Por otra parte, los beneficios del desarrollo de la tecnología nos permiten conocer mejor los procesos que ocurren en la naturaleza y contar con elementos para ofrecer mejores alternativas, sin embargo, es la misma tecnología la que nos ha permitido tener sistemas más eficaces de captura aumentando nuestro poder como depredadores del medio ambiente.




DESTRUCCION DEL HABITAT
La destrucción del hábitat es el proceso por el cual un
hábitat natural es transformado en un hábitat incapaz de mantener a las especies originarias del mismo. Las plantas y animales que lo utilizaban son destruidas o forzadas a emigrar, como consecuencia hay una reducción en la biodiversidad. La agricultura es la causa principal de la destrucción de hábitats. Otras causas importantes son la minería, la tala de árboles, la sobrepesca y la proliferación urbana. La destrucción de hábitats es actualmente la causa más importante de la extinción de especies en el mundo.[1] Es un proceso con poderosos efectos en la evolución y conservación biológicas. Las causas adicionales incluyen la fragmentación de hábitats, procesos geológicos, cambios climáticos, especies invasoras, alteraciones de los nutrientes y las actividades humanas.
Los términos pérdida de hábitat y reducción de hábitat se usan en un sentido más amplio incluyendo la pérdida de hábitat por otros factores tales como
contaminación del agua y contaminación acústica.
En sus términos más simples cuando se destruye un hábitat, las plantas, animales y otros organismos que lo ocupaban ven limitada su
capacidad de carga, lo que lleva a un declive de poblaciones y hasta a la extinción. El mayor riesgo que enfrentan las especies de todo el mundo es la pérdida de hábitat. Temple (1986) encontró que el 82% de las especies de aves en peligro están seriamente amenazadas por la pérdida de hábitats. La destrucción de hábitats a veces disimulada con el nombre de cambio en el uso de la tierra es la causa principal de pérdida de biodiversidad.































LA INTRODUCCIÓN DE ESPECIES EXÓTICAS
Ésta es una las razones frecuentes que explican la desaparición de especies y el cambio de ambiente natural.
Para muchos es conocido el efecto de haber introducido al conejo doméstico a tierras australianas hace poco más de 100 años. Esta especie al ser llevada por los colonos que emigraron al continente, se encontraron con un magnífico ambiente donde no existía ningún depredador que los amenazara. Así, en unos pocos años, la población de conejos creció tanto que ocupó amplias zonas en la pradera compitiendo ventajosamente por el alimento con las especies nativas. Hoy es considerado como una plaga. El caso del gato doméstico ha corrido similar suerte. Una vez introducido como mascota, abandonado o vagabundo, el gato antes doméstico se ha transformado en animal salvaje. Sin seria competencia por el alimento o por el espacio, el gato se ha reproducido rápidamente y hoy, sus colonias cubren amplias zonas en los linderos de las grandes urbes australianas. Pronto, la fauna y la flora del lugar dieron muestras de una importante transformación y, actualmente, se realizan importantes esfuerzos por frenar el crecimiento de esta población y recobrar parte del equilibrio de la región.
Como éste hay muchos ejemplos de introducción de variedades de una zona a otra a la que generan importantes procesos de desequilibrio y deterioro. Entre estos procesos ocupa un importante sitio el contagio de cierto tipo de enfermedades, que son introducidas por las nuevas especies y que afectan drásticamente a las poblaciones naturales. El tapir, por ejemplo, ha sido especialmente vulnerable a diferentes enfermedades que sufren los caballos y ello ha mermado significativamente su población.
Varias lagunas de nuestro país, como la de Chapala, han sido objeto de procesos como los mencionados. La introducción de lirio, por ejemplo, ha puesto en serio peligro el ecosistema. El cambio ha sido muy drástico y sus efectos difícilmente serán revertidos.
Con el desarrollo humano en las grandes ciudades, muchas especies oportunistas han aprovechado condiciones excelentes para proliferar. El aumento de la población de ratas, moscas, cucarachas y bacterias en los drenajes y basureros, tiene un claro motivo: la enorme producción de basura y desperdicios y el mal manejo que se les da a éstos. Muchas otras especies antes silvestres han empezado a adaptarse a estos rasgos de civilización, zorros, osos, ardillas, palomas y gorriones son parte de la fauna cautiva ahora de basureros, parques y refugios. La cría de mascotas es hoy una gran industria de importante valor económico. La convivencia con canarios, perros y gatos se complementa ahora con muchas otras especies consideradas silvestres, que han venido adaptándose a los medios urbanos y suburbanos, al ser erradicadas de sus medios naturales. Las especies domésticas también se encuentran en peligro. El impacto de las fuerzas que operan en el mercado ha privilegiado a algunas especies domésticas, que ahora se explotan a nivel casi industrial. Estas especies son las que han mostrado un mayor potencial económico (son resistentes, de fácil y barato manejo, altamente productivas) y han venido desplazando aquellas que no han reunido esas características. Muchos animales han sido sustituidos también por máguinas y nuevos sistemas; los caballos, bueyes y asnos han sido cambiados por tractores y máquinas agrícolas.Las fibras sintéticas suplen a la lana y a la seda. La FAO estima que cada semana desaparecen dos especies domésticas. Las aves son las más sensibles a esta tendencia, más del 34 % de ellas se encuentran amenazadas.













CONTAMINACIÓN
La contaminación es cualquier, sustancia o forma de energía que puede provocar algún daño o desequilibrio, irreversible o no, en el medio inicial.
Para que exista contaminación, la sustancia contaminante deberá estar en cantidad relativa suficiente como para provocar ese desequilibrio. Esta cantidad relativa puede expresarse como la masa de la sustancia introducida en relación con la masa o el volumen del medio receptor de la misma. Este cociente recibe el nombre de
concentración.
Los agentes contaminantes tienen relación con el crecimiento de las poblaciones ya que al aumentar éstas, la contaminación que ocasionan es mayor. Los contaminantes por su consistencia, se clasifican en sólidos, líquidos y gaseosos.
Los agentes sólidos están constituidos por la basura en sus diversas presentaciones. Provocan contaminación del suelo, del aire y del agua. Del suelo porque produce microorganismos y animales dañinos; del aire porque produce mal olor y gases tóxicos y del agua porque la ensucia y no puede utilizarse.Los agentes líquidos están conformados por las aguas negras , los desechos industriales, los derrames de combustibles derivados del petróleo los cuales dañan básicamente el agua de ríos, lagos, mares y océanos; con ello provocan la muerte de diversas especies.Los agentes gaseosos están constituidos por la combustión del petróleo (
óxido de nitrógeno y azufre) y por la quema de combustibles como la gasolina (liberando monóxido de carbono), basura y desechos de plantas y animales.Todos los agentes contaminantes provienen de una fuente determinada y pueden provocar enfermedades respiratorias y digestivas. Es necesario que el hombre tome conciencia del problema.
Se denomina
contaminación atmosférica o contaminación ambiental a la presencia en el ambiente de cualquier agente (físico, químico o biológico) o bien de una combinación de varios agentes en lugares, formas y concentraciones tales que sean o puedan ser nocivos para la salud, la seguridad o para el bienestar de la población; o que puedan ser perjudiciales para la vida vegetal o animal; o impidan el uso normal de las propiedades y lugares de recreación, y el goce de los mismos. La contaminación ambiental es también la incorporación a los cuerpos receptores de sustancias sólidas, líquidas o gaseosas, o mezclas de ellas, siempre que alteren desfavorablemente las condiciones naturales de los mismos, o que puedan afectar la salud, la higiene o el bienestar del público.
Expertos en salud ambiental y cardiólogos de la Universidad de California del Sur, acaban de demostrar por primera vez lo que hasta ahora era apenas una sospecha: la contaminación ambiental de las grandes ciudades afecta la salud cardiovascular. Se comprobó que existe una relación directa entre el aumento de las partículas contaminantes del aire de la ciudad y el engrosamiento de la pared interna de las arterias (la "íntima media"), que es un indicador comprobado de la
arteriosclerosis.
El efecto persistente de la contaminación del aire respirado, en un proceso silencioso de años, conduce finalmente al desarrollo de afecciones cardiovasculares agudas, como el
infarto. Al inspirar partículas ambientales con un diámetro menor de 2,5 micrómetros, ingresan en las vías respiratorias más pequeñas y luego irritan las paredes arteriales. Los investigadores hallaron que por cada aumento de 10 microgramos por metro cúbico de esas partículas, la alteración de la pared íntima media de las arterias aumenta un 5,9 %. El humo del tabaco y el que en general proviene del sistema de escape de los autos produce la misma cantidad de esas partículas. Normas estrictas de aire limpio contribuirían a una mejor salud con efectos en gran escala.
Uno más de los efectos es el debilitamiento de la
capa de ozono, que protege a los seres vivos de la radiación ultravioleta del sol, debido a la destrucción del ozono estratosférico por cloro y bromo procedentes de la contaminación. El efecto invernadero está acentuado por el aumento de la concentración de CO2 atmosférico y otros gases de efecto invernadero como, por ejemplo, el metano.















CALENTAMIENTO GLOBAL
Calentamiento global es un término utilizado habitualmente en dos sentidos:
1. Es el fenómeno observado en las medidas de la temperatura que muestra en promedio un aumento en la
temperatura de la atmósfera terrestre y de los océanos en las últimas décadas.
2. Es una teoría que predice, a partir de proyecciones basadas en simulaciones computacionales, un crecimiento futuro de las temperaturas.
Algunas veces se utilizan las denominaciones
cambio climático, que designa a cualquier cambio en el clima, o cambio climático antropogénico, donde se considera implícitamente la influencia de la actividad humana. Calentamiento global y efecto invernadero no son sinónimos. El efecto invernadero acrecentado por la contaminación puede ser, según algunas teorías, la causa del calentamiento global observado.
La temperatura del planeta ha venido elevándose desde mediados del
siglo XIX, cuando se puso fin a la etapa conocida como la pequeña edad de hielo.










Gráfico de la concentración de dióxido de carbono en la atmósfera terrestre (azul) y la temperatura media global (rojo), en los últimos 1000 años.
Cualquier tipo de cambio climático además implica cambios en otras variables. La complejidad del problema y sus múltiples interacciones hacen que la única manera de evaluar estos cambios sea mediante el uso de modelos computacionales que intentan simular la física de la atmósfera y del océano y que tienen una precisión limitada debido al desconocimiento del funcionamiento de la atmósfera.
La teoría antropogénica predice que el calentamiento global continuará si lo hacen las emisiones de
gases de efecto invernadero (GEI). El cuerpo de la ONU encargado del análisis de los datos científicos es el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés de Inter-Governmental Panel on Climate Change).El IPCC indica que… La mayoría de los aumentos observados en las temperaturas medias del globo desde la mitad del siglo XX son muy probablemente debidos al aumento observado en las concentraciones de GEI antropogénicas.". Sin embargo, existen algunas discrepancias al respecto de que el dióxido de carbono sea el gas de efecto invernadero que más influye en el Calentamiento Global de origen antropogénico.
El
Protocolo de Kyoto, acuerdo promovido por el IPCC, promueve una reducción de emisiones contaminantes (principalmente CO2). El protocolo ha sido tachado en ciertas ocasiones de injusto, ya que el incremento de las emisiones tradicionalmente está asociado al desarrollo económico, con lo que las naciones a las que más afectaría el cumplimiento de este protocolo podrían ser aquellas zonas menos desarrolladas.
En enero de 2009 la comisión medioambiental del Senado de los Estados Unidos elaboró una lista con 650 científicos que disentían del origen antrópico de los cambios de temperatura de la Tierra.[]



EFECTO INVERNADERO
Se denomina efecto invernadero al fenómeno por el cual determinados gases, que son componentes de la atmósfera planetaria, retienen parte de la energía que el suelo emite por haber sido calentado por la radiación solar. Afecta a todos los cuerpos planetarios dotados de atmósfera. De acuerdo con el actual consenso científico, el efecto invernadero se está viendo acentuado en la Tierra por la emisión de ciertos gases, como el dióxido de carbono y el metano, debida a la actividad económica humana.
Este fenómeno evita que la energía solar recibida constantemente por la Tierra vuelva inmediatamente al espacio, produciendo a escala planetaria un efecto similar al observado en un
invernadero.
La Tierra, como todo cuerpo caliente, emite radiación, pero al ser su temperatura mucho menor que la solar, emite
radiación infrarroja de una longitud de onda mucho más larga que la que recibe. Sin embargo, no toda esta radiación vuelve al espacio, ya que los gases de efecto invernadero absorben la mayor parte.
La atmósfera transfiere la energía así recibida tanto hacia el espacio (37,5%) como hacia la superficie de la Tierra (62,5%). Ello representa 324 W/m2, casi la misma cantidad de energía que la proveniente del Sol, aún sin albedo. De este modo, el equilibrio térmico se establece a una temperatura superior a la que se obtendría sin este efecto. La importancia de los efectos de absorción y emisión de radiación en la atmósfera son fundamentales para el desarrollo de la vida tal y como se conoce. De hecho, si no existiera este efecto la temperatura media de la superficie de la Tierra sería de unos -22
ºC, y gracias al efecto invernadero es de unos 14ºC.
En zonas de la Tierra cuya atmósfera tiene poca proporción de gases de efecto invernadero (especialmente de vapor de agua), como en los grandes desiertos, las fluctuaciones de temperatura entre el día (absorción de radiación solar) y la noche (emisión hacia el cielo nocturno) son muy grandes.
Desde hace unos años el hombre está produciendo un aumento de los gases de efecto invernadero, con lo que la atmósfera retiene más calor y devuelve a la Tierra aún más energía causando un desequilibrio del balance radiativo y un
calentamiento global.
Además, se puede asemejar con un invernadero, siendo el CO2 comparado con el techo de cristal.
Los denominados gases de efecto invernadero o gases invernadero, responsables del efecto descrito, son:
Vapor de agua (H2O).
Dióxido de carbono (CO2).
Metano (CH4).
Óxidos de nitrógeno (NOx).
Ozono (O3).
Clorofluorocarbonos (CFCl3).
Si bien todos ellos (salvo los CFCs) son naturales, en tanto que ya existían en la atmósfera antes de la aparición del hombre, desde la
Revolución industrial y debido principalmente al uso intensivo de los combustibles fósiles en las actividades industriales y el transporte, se han producido sensibles incrementos en las cantidades de óxidos de nitrógeno y dióxido de carbono emitidas a la atmósfera, con el agravante de que otras actividades humanas, como la deforestación, han limitado la capacidad regenerativa de la atmósfera para eliminar el dióxido de carbono, principal responsable del efecto invernadero.
Estos cambios causan un paulatino incremento de la temperatura terrestre, el llamado
cambio climático o calentamiento global que, a su vez, es origen de otros problemas ambientales:


Variación de la temperatura global y de la concentración de dióxido de carbono presente en el aire en los últimos 1000 años.
Desertización y sequías, que causan hambrunas
Deforestación, que aumenta aún más el cambio
Inundaciones
Fusión de los casquetes polares y otros glaciares, que causa un ascenso del nivel del mar, sumergiendo zonas costeras. Sólo influye en dicha variación el hielo apoyado en suelo firme, ya que el hielo que flota en el mar no aumenta el nivel del agua.
Destrucción de
ecosistemas
Además, el efecto invernadero es uno de los principales factores que provocan el calentamiento global de la Tierra, debido a la acumulación de los llamados gases invernadero CO2, H2O, O3, CH4 y CFCs en la atmósfera.
El efecto invernadero es producido tanto de manera natural como de manera artificial (principalmente por la industrialización) debido al aumento de los gases invernaderos en la atmósfera.






Variación de la temperatura global y de la concentración de dióxido de carbono presente en el aire en los últimos 1000 años.
Desertización y sequías, que causan hambrunas
Deforestación, que aumenta aún más el cambio
Inundaciones
Fusión de los casquetes polares y otros glaciares, que causa un ascenso del nivel del mar, sumergiendo zonas costeras. Sólo influye en dicha variación el hielo apoyado en suelo firme, ya que el hielo que flota en el mar no aumenta el nivel del agua.
Destrucción de
ecosistemas
Además, el efecto invernadero es uno de los principales factores que provocan el calentamiento global de la Tierra, debido a la acumulación de los llamados gases invernadero CO2, H2O, O3, CH4 y CFCs en la atmósfera.
El efecto invernadero es producido tanto de manera natural como de manera artificial (principalmente por la industrialización) debido al aumento de los gases invernaderos en la atmósfera.















PROBLEMATICA Y DETERIORO AMBIENTAL